En una decisión política clave, el directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) recortará hoy los sobrecargos que paga Argentina, lo que implicará un ahorro anual cercano a 400 millones de dólares. Esta medida también beneficiará a otros aliados globales de Estados Unidos, como Ucrania, Egipto, Jordania y Kenia.
La medida, impulsada por Estados Unidos, busca aliviar la situación económica de Ucrania en el contexto de su conflicto con Rusia. El recorte de sobrecargos, que son intereses excesivos que el FMI cobra a los países deudores, es una respuesta a las peticiones de figuras como el Papa Francisco, el premio Nobel Joseph Stiglitz y otros economistas.
Los sobrecargos se aplican a aquellos créditos que superan el 187.5% de la cuota y representan un 2% del saldo de la deuda impaga. Sin embargo, tras la nueva decisión, el umbral para estos recargos aumentará, y la tasa básica se reducirá, permitiendo así un alivio financiero significativo para Argentina.
Desde 2021, Argentina ha pagado aproximadamente 3.700 millones de dólares en sobrecargos, una carga considerable dada la situación crítica de sus reservas del Banco Central. La carta enviada al directorio del FMI por académicos y exfuncionarios destaca cómo estos recargos son procíclicos y regresivos, afectando a los países más vulnerables durante sus crisis económicas.
La decisión del FMI, que se espera aprobar con el respaldo del 70% de los votos, responde a una estrategia política que ha estado en discusión desde antes de la invasión de Rusia a Ucrania. Además de Argentina, otros 21 países se beneficiarán de esta reducción en los sobrecargos.
La aprobación de esta medida no solo representa un alivio inmediato para Argentina, sino que también tiene un impacto positivo en la estabilidad económica de varios países en desarrollo que enfrentan condiciones adversas.
