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Jorge Lanata: Sus últimos días y legado en el periodismo argentino

El periodismo argentino pierde a una de sus figuras más emblemáticas: Jorge Lanata, quien falleció el lunes por la tarde en el Hospital Italiano de Buenos Aires. Sus últimos días estuvieron marcados por momentos críticos y el inquebrantable apoyo de su familia y amigos. Este artículo explora las circunstancias de su partida y el legado que deja como referente del periodismo nacional.

La vida de Jorge Lanata en sus últimas horas

Contexto y trayectoria médica

Desde el 14 de junio, Lanata enfrentó un cuadro de salud delicado que incluyó complicaciones respiratorias, trombosis venosa profunda y acumulación de líquido abdominal. A pesar de los esfuerzos médicos, su estado crítico impidió su traslado a un centro especializado en rehabilitación. Durante su internación, su esposa Elba Marcovecchio y sus hijas Bárbara y Lola estuvieron a su lado, mostrando fortaleza y esperanza en momentos adversos.

Navidad en el hospital

Elba relató cómo la Navidad fue distinta este año, dividiendo su tiempo entre el hospital y el hogar. En un gesto conmovedor, le leyó a Lanata el libro Contra la verdad de Nietzsche, aunque admitió que él prefería la poesía. La noche del 24 de diciembre fue tranquila, con el periodista sedado en terapia intensiva, acompañado por su amigo Gabriel Levinas, quien llevó un detalle para el personal médico como muestra de gratitud.

Complicaciones finales

En sus últimos días, Jorge enfrentó nuevas adversidades: una úlcera sangrante complicó su salud, requiriendo intervenciones como el uso de inotrópicos para mejorar la función cardíaca. Aunque mostró signos de recuperación momentánea, su estado empeoró el viernes pasado, hasta llevarlo a su deceso el lunes por la tarde.

La red de apoyo más cercana

El círculo íntimo de Lanata estuvo compuesto por su actual esposa y sus exesposas, Sarah Stewart Brown y Andrea Rodríguez, madres de sus hijas. Todas desempeñaron un papel crucial en el cuidado del periodista, consolidando un entorno de amor y apoyo en sus momentos más difíciles.

Conclusión

Jorge Lanata deja un legado imborrable en el periodismo argentino. Su lucha contra las adversidades de salud y el cariño incondicional de su familia y amigos destacan la resiliencia que lo caracterizó hasta el final. Su partida marca el fin de una era, pero su influencia perdurará como inspiración para generaciones futuras.

( Infobae )