Crisis en Bolivia: Secuestro de Soldados por Seguidores de Evo Morales.

La crisis en Bolivia ha alcanzado un punto crítico con el secuestro de 20 soldados por seguidores del expresidente Evo Morales. Este evento, que ocurre en medio de una serie de protestas prolongadas en la región del Trópico de Cochabamba, ha encendido alarmas sobre la estabilidad del país y la seguridad de sus fuerzas armadas. Las Fuerzas Armadas han calificado la situación como «traición a la patria», subrayando la gravedad del conflicto y la incertidumbre que rodea a los uniformados retenidos.

Contexto de la crisis en Bolivia

La crisis en Bolivia, marcada por disturbios y manifestaciones, se ha intensificado con la toma de tres cuarteles militares por parte de grupos leales a Evo Morales. Las protestas, que ya llevan 19 días, han colocado a la nación en un estado de alerta. Las Fuerzas Armadas confirmaron que estos «grupos armados irregulares» secuestraron a una veintena de soldados, profundizando la tensión en el país. El regimiento «Cacique Juan Maraza» fue uno de los principales afectados, mientras que en Puerto Villarroel, otro grupo mantiene una vigilancia constante fuera de una base naval.

Relato de los soldados y las condiciones en los cuarteles

En un video que circuló en medios locales, un soldado denunció el estado de precariedad en el que se encuentran, mencionando que no tienen acceso a agua ni electricidad y que están rodeados por más de 2,000 manifestantes conocidos como «evistas». Los uniformados, en un llamado desesperado, solicitaron al gobierno de Luis Arce que no intervenga en los bloqueos para evitar poner en peligro sus vidas. «Estamos padres, hijos, hermanos de familias enteras”, expresó uno de los militares, dejando en evidencia la situación de vulnerabilidad.

Respuesta de las Fuerzas Armadas y el Gobierno

Las Fuerzas Armadas emitieron un comunicado denunciando no solo el secuestro del personal, sino también la sustracción de armamento y munición, acciones que calificaron como «traición a la patria». En un tono enérgico, instaron a los manifestantes a abandonar las instalaciones de manera pacífica, recordando que los retenidos «son hijos del pueblo» que cumplen su deber patriótico. Por su parte, el presidente Luis Arce reafirmó la gravedad de los hechos, informando que tres unidades militares han sido tomadas y enfatizando la necesidad de una solución inmediata.

La figura de Evo Morales y su impacto en la situación

Evo Morales, atrincherado en la región del Chapare, se enfrenta a la posibilidad de una orden de captura debido a acusaciones de trata de personas y estupro. Su influencia en las protestas ha sido un factor determinante en la escalada de tensiones. Las demandas de sus seguidores y la férrea resistencia a las autoridades han colocado a Bolivia en una encrucijada política y social.

Conclusión:

La crisis en Bolivia continúa desafiando la capacidad del gobierno y las fuerzas armadas para restaurar el orden. El secuestro de los soldados y la toma de instalaciones militares subrayan la profundidad de la división y el poder de los seguidores de Evo Morales. Ante este panorama, el país se enfrenta a la urgente necesidad de encontrar soluciones pacíficas que permitan proteger a sus ciudadanos y garantizar la estabilidad nacional.

( DW )